The money of the street...
Los otros días iba por la Av. Winston Churchill cuando delante de mí un señor de esos que venden accesorios para celulares, recibió una papeleta como pago de alguien y seguido la besó (la papeleta) en un acto de agradecimiento espiritual. Este comportamiento es muy común en personas que viven de lo que hacen en el día.
Luego de ver eso, lo primero que me llegó a la mente fueron los consejos de mi madre cuando era pequeño: "Lávate las manos luego de topar el dinero porque tiene microbios". Entonces me puse a pensar por cuantas manos y cuantos lugares pasa el dinero en ese intercambio diario. Pasa de ser el objeto más añorado por alguien a ser parte de un grupo de papeletas de alguien que la considera poco valor. Puede durar segundos siendo propiedad de una persona o años guardada en un lugar especial de otra persona. Pero la cuestión es que en su vida útil pasa por muchos lugares y manos diferentes.
Hablando de ese tema también me pongo a pensar en otro asunto que aveces es complejo y me llena de dudas cuando se presenta la situación. El dilema es "dar o no dar", con esto me refiero a las personas que piden en la calle, esos niños en su mayoría haitianos que todavia en la madrugada que encuentran pidiendo en las esquinas de nuestra ciudad. Particularmente creo que si les doy dinero, estoy ayudando a que ellos sigan haciendo eso y últimamente escucho reclamos en los medios de comunicación que les piden a las autoridades que eliminen a esas personas de las esquinas. Sin embargo que otra opción se les está ofreciendo?. Es fácil decir "quiten a esas personas de las calles" pero que van a hacer, que otra alternativa tienen? y esto también incluye a los vendedores ambulantes.
Y estoy sumamente a favor de que esas personas de la calle dejen de estar acosando a los que conducimos, sobre todo los niños que ven esta desagradable situación que los perturba, asusta y los confunde. Pero ojalá algún día podamos encontrar una solución con sentido para estas personas desdichadas.